En el barrio Pueblo Nuevo del municipio de Tuluá, dos menores de 15 años desescolarizados fueron aprehendidos en flagrancia momentos en que huían a bordo de una motocicleta tras haberle hurtado un celular a un ciudadano.

El celular avaluado en 2 millones de pesos fue regresado a la víctima, mientras que los menores fueron dejados a disposición de la Fiscalía por el delito de hurto calificado y agravado.

En hechos aislados, en el centro de Tuluá, un habitante de calle intimidó con arma cortopunzante a una mujer comerciante, momentos en que se encontraba en un establecimiento comercial a quien le hurtó muebles enceres.

Ante el llamado de la ciudadanía, la Policía Nacional realizó un plan candado en el cual fue capturado el agresor, a quien se le halló en su poder los elementos hurtados y arma tipo cuchillo.

El capturado con 7 anotaciones judiciales por los delitos de hurto, lesiones personales y daño en bien ajeno, fue dejado a disposición de la Fiscalía; el ente acusador le imputó el delito de hurto calificado y agravado. Ante la contundencia de los elementos materiales probatorios y sus antecedentes penales, un juez dictó una medida de aseguramiento restrictiva de la libertad en centro carcelario.

Finalmente, en inmediaciones del centro comercial La Herradura, durante planes de solicitud de antecedentes a personas y vehículos, fue capturado un hombre de 18 años de edad, momentos en que arrastraba una motocicleta que había sido hurtada en el parqueadero en modalidad halado.

El velocípedo avaluado en 6 millones de pesos fue regresado a su propietario. Mientras el capturado fue dejado a disposición de la Fiscalía por el delito de receptación.