El municipio de Aguachica, en el departamento del Cesar, vive momentos de profundo dolor e indignación tras una masacre ocurrida el pasado domingo 29 de diciembre, que dejó tres personas muertas y una en estado crítico. Las víctimas, todas miembros de la familia Lora Rincón, fueron atacadas a plena luz del día mientras almorzaban en un restaurante del centro de la población.
Los hechos
El ataque se registró en el restaurante «La Morienda», ubicado en la calle 5 con carrera 30, a pocos metros de la estación de policía de Aguachica. Según testigos, un hombre ingresó al establecimiento a bordo de una motocicleta, desenfundó un arma de fuego y disparó en repetidas ocasiones contra la familia.
En el lugar murieron Marlon Lora, pastor de la iglesia Príncipe de Paz Villaparaguay; su esposa, Yorley Rincón, y su hija, Ángela Lora Rincón, quien también era periodista. Santiago Lora Rincón, hijo mayor de la pareja y único sobreviviente del ataque, permanece en estado crítico con diagnóstico de muerte cerebral, recibiendo respiración asistida en un hospital de la zona.
Medidas y reacciones
Tras la masacre, las autoridades locales han intensificado las investigaciones. La Gobernación del Cesar y la Alcaldía de Aguachica ofrecieron una recompensa de 50 millones de pesos a quienes aporten información que permita capturar a los responsables. Los ciudadanos pueden comunicarse con la Policía Nacional a través de la línea contra el crimen: 3143587212.
La alcaldesa de Aguachica, Greisy Roqueme, decretó toque de queda desde las 8:00 p.m. del domingo hasta las 6:00 a.m. del lunes para garantizar la seguridad mientras avanzan las pesquisas. Asimismo, suspendió todas las festividades programadas para fin de año como muestra de solidaridad con las víctimas y sus familias.
“Estos asesinatos nos han estremecido el corazón. Exigimos al Gobierno Nacional y a la Fuerza Pública que redoblen esfuerzos para combatir la ola de violencia que enfrentamos”, expresó la mandataria en un comunicado oficial.
Investigaciones en curso
El Consejo de Seguridad realizado en Aguachica reveló que el caso está siendo investigado por un equipo conjunto de la Policía Nacional, el Ejército y la Fiscalía. Las autoridades están analizando las grabaciones de cámaras de seguridad del sector para identificar a los responsables.
El coronel Eduardo Chamorro Pinzón, comandante de Policía del Cesar, aseguró: “No descansaremos hasta esclarecer este ataque y llevar a los culpables ante la justicia. Este crimen no quedará en la impunidad”.
Impacto social
La comunidad de Aguachica se encuentra consternada por la pérdida de una familia que era un pilar de la sociedad. Los esposos eran líderes religiosos que dedicaban su vida al servicio comunitario, mientras que Ángela era una prometedora profesional.
El defensor de derechos humanos Edwar Álvarez Vacca hizo un llamado al Gobierno Nacional para que implemente rutas de protección colectiva para líderes religiosos en el Cesar y el Magdalena, quienes, según denuncias, enfrentan constantes amenazas de estructuras criminales.
Solidaridad nacional
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, condenó el ataque a través de sus redes sociales y pidió a las autoridades actuar con celeridad para esclarecer los hechos. Líderes sociales, políticos y organizaciones han expresado su rechazo a este acto de violencia que enluta al país.
Un llamado a la esperanza
Aunque el dolor de esta tragedia es profundo, las autoridades y la comunidad de Aguachica coinciden en que no se puede permitir que la violencia continúe arrebatando vidas y esperanza. La memoria de la familia Lora Rincón, marcada por su vocación de servicio, debe ser un llamado para construir una sociedad más justa y segura.