Un habitante de calle, curtido por años de caminatas y encuentros, recorre este corredor vial mientras observa y comenta el avance de una de las obras más esperadas por el suroccidente colombiano
.A lo largo de la doble calzada entre Buga y Buenaventura, un personaje inesperado se ha convertido en testigo silencioso del progreso.
“Llevo años caminando estas rutas”: testimonio de un testigo inesperado del progreso ,habitante de calle
«Hola, aquí es donde comienza la doble calzada. Me han dicho que la van a tirar hasta Buga… ¿será verdad?», dice con curiosidad mientras saluda a los camioneros que pasan a toda velocidad.
El hombre, de voz amable y mirada atenta, conoce cada curva de esta vía. Lleva años caminándola y resalta, a su manera, los cambios que ha notado.

En uno de sus encuentros, charla con Duvalier García, un conductor que confirma lo que muchos esperaban: «Sí, claro que la van a arreglar.
Ya empezaron por esta parte, y saliendo de Buenaventura también. Eso nos beneficia mucho. Llegamos más rápido a casa y con menos cansancio. Tiempo es dinero».
La conversación es simple, pero reveladora. A través de preguntas espontáneas, este caminante construye una especie de mapa humano del desarrollo
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La comunidad de Media Canoa confirma los beneficios del proyecto vial
Más adelante, se topa con Edgardo Trejos, líder comunitario de Media Canoa. «Sí, ya están trabajando. Esta obra va hasta Buga y trae beneficios reales
Nos han visitado, nos han escuchado. Hay comunicación con la concesionaria Camino del Pacífico»

Más de 6.000 empleos y 400 mujeres capacitadas: el impacto social de la obra
Trejos resalta que no se trata solo de pavimento. “Han capacitado a más de 400 mujeres en temas como emprendimiento, soldadura y manejo de maquinaria.
Incluso han apoyado la economía local mediante programas sociales”
Union Vial Camino del Pacífico: el consorcio internacional que lidera la transformación
El proyecto de la doble calzada Buga-Buenaventura está a cargo del concesionario Union Vial Camino del Pacífico, que trabaja bajo un contrato de quinta generación con la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI).
La obra incluye 34 kilómetros de doble calzada, la construcción de túneles en Cisneros, más de 22 puentes vehiculares y 12 peatonales. También se proyectan más de 6.000 empleos en la región.
Además del componente de infraestructura, la iniciativa contempla inversiones sociales y ambientales por más de 200.000 millones de pesos.
Las comunidades a lo largo del corredor vial han sido incluidas mediante consultas previas y programas de compensación ambiental.
La doble calzada: entre el cemento, la inclusión y la esperanza
Antes de despedirse, el caminante agradece la información. “Uno tiene que investigar, porque hay mucho chisme por ahí. Pero es bueno saber que sí están haciendo las cosas bien”.
Este hombre sin hogar, que muchos podrían pasar por alto, resulta ser el mejor cronista del camino.
A través de sus pasos y sus preguntas, va construyendo una mirada auténtica del impacto que una gran obra puede tener sobre la gente común.
Porque a veces, el desarrollo también se mide en las historias que se cuentan al borde de la carretera.